«Contra toda la opresión que significa vivir en estas cajas de zapatos, existe una salida, una vía de escape, ilegal, como todas las vías de escape. En clara contravención al código de planificación urbana, se abren unas minúsculas, irregulares e irresponsables ventanas que permiten que unos milagrosos rayos de luz iluminen la oscuridad en la que vivimos».

Con diálogos cargados de sentido, el director argentino Gustavo Taretto nos presentaba en 2004 el cortometraje Medianeras. Un film de 28 minutos de duración, con un guión que destaca por su brillante crítica social y la abundancia de los segundos sentidos.

Una historia que nos habla del ser humano que vaga en soledad por una sociedad superpoblada como la de Buenos Aires y de cómo las coincidencias marcan el curso de las vidas de los protagonistas que narran los hechos en primera persona.

“Buenos aires crece descontrolada e imperfecta, es una ciudad superpoblada en un país desierto, una ciudad en la que se yerguen miles y miles y miles y miles de edificios sin ningún criterio…Probablemente estas irregularidades nos reflejen perfectamente, irregularidades estéticas y éticas…“

Entre los 40  premios internacionales que ganó, Medianeras conquistó al jurado y al público del V Festival Internacional de Cortometrajes ‘Almería en Corto’, haciéndose con el primer premio del certamen internacional y con el galardón del público en 2006. En la XIII edición del Festival Internacional de Jóvenes Realizadores de Granada obtuvo el premio al mejor corto de acción real y fue galardonado con el premio del público entre otros.

En la actualidad, Taretto ha retomado sus reflexiones de adolescente en las que se planteaba de qué manera influía la gente en la arquitectura y viceversa,  para llevar a cabo su primer largometraje. Un largo que está basado en la historia de su reconocido Medianeras y que lleva el mismo nombre por título.

El realizador argentino aprovechó el marco de la Berlinale para estrenar la película dentro de la sección Panorama Especial del festival. Este largo, además, marca para la actriz española Pilar López de Ayala su debut dentro del cine argentino.

 

1 comentario

Los comentarios están cerrados