Ayer se cumplían 50 años del mayor galardón que el cine español ha obtenido en Cannes.
Ha pasado medio siglo desde que Luis Buñuel recibió la Palma de Oro por su película “Viridiana”, protagonizada por Silvia Pinal, Fernando Rey y Francisco Rabal. Una burla hacia el franquismo que tuvo que ser trasladada clandestinamente hasta París para completar su producción.
El periódico oficial del Vaticano, L’ Osservatore Romano llegó a calificar de «blasfema» la película y pidió la excomunión de todo el equipo. Llegando a decir que la música de Mozart y Händel, parte de la BSO del filme, era «perversa». Mientras, en España, se negó su existencia como película española. «La hicieron desaparecer, como si nunca se hubiera rodado», cuenta Pere Portabella, productor cinematográfico.
Medio siglo después, el director manchego Pedro Almodóvar aterriza en la 64 edición del Festival de Cannes en su jet privado junto al elenco de su última película “La piel que habito”: Antonio Banderas, Elena Anaya, Blanca Suárez, Jan Cornet y Marisa Paredes. Y que compite por el máximo galardón del festival, la Palma de Oro.
En el periódico El País, Pedro Almodovar declaró que esta película es una de las más duras de su carrera y la define como «una historia que se acerca al género de terror, pero sin gritos ni sustos, -algo que me apetece mucho porque nunca lo he tocado-, no respetaré ninguna de sus reglas.»”
Esta misma mañana se ha podido ver por primera vez el film, que ha sido recibido con numerosos aplausos por parte de la crítica que posicionan al director como unos de los candidatos a recibir el palmarés que Robert de Niro, presidente del jurado de esta 64 edición, tendrá el honor de anunciar este próximo domingo.